Una advertencia diplomática que marca un nuevo punto de tensión:
La tensión diplomática entre Cuba y Estados Unidos se ha intensificado después de que el gobierno cubano emitiera este viernes una advertencia verbal formal al jefe de la misión diplomática de Estados Unidos en La Habana, Mike Hammer. Este es acusado de promover acciones que atentan contra el orden interno del país. La cancillería cubana denunció públicamente que el diplomático habría incitado a ciudadanos de la isla a cometer actos considerados graves por las autoridades, entre ellos, desobediencia civil, agresiones al sistema constitucional y actos de resistencia contra las instituciones.
En un comunicado difundido por el Ministerio de Relaciones Exteriores, se señala que estas acciones “violan abiertamente los principios establecidos en la Convención de Viena sobre relaciones diplomáticas”. Según el gobierno cubano, Hammer está cruzando los límites permitidos por su inmunidad diplomática y ha traspasado la línea entre la representación internacional y la intervención política directa.
“La inmunidad de un diplomático no puede ser escudo para promover injerencias o alteraciones del orden interno”, apuntó la declaración oficial, dejando claro el descontento de La Habana con el comportamiento del representante estadounidense.
Viajes por la isla y contactos con disidentes aumentan la tensión diplomática entre Cuba y Estados Unidos:
Mike Hammer, un experimentado diplomático que llegó a Cuba hace apenas seis meses, ha mantenido una agenda activa durante su estancia en la isla. Según fuentes del gobierno cubano, ha realizado múltiples visitas a provincias, donde ha sostenido encuentros con opositores al régimen, defensores de derechos humanos y miembros de grupos religiosos. Aunque estas acciones son habituales en el marco de relaciones internacionales más abiertas, para el gobierno cubano constituyen una provocación directa.
reunido con opositora
En paralelo, el Departamento de Estado de EE. UU. salió en defensa de su funcionario, reafirmando que las actividades de Hammer están alineadas con la política exterior del país. “Mike Hammer representa con orgullo al presidente de los Estados Unidos implementando una política firme hacia el régimen cubano y apoyando a quienes luchan por la libertad en la isla”, señaló un portavoz del Departamento de Estado.
reunido con opositoras
Washington también dejó claro que seguirá reuniéndose con lo que denomina “patriotas cubanos”, lo que ha sido interpretado por La Habana como una amenaza directa a su estabilidad institucional.
La tensión diplomática entre Cuba y Estados Unidos marcada por crisis económica y sanciones:
El creciente conflicto diplomático entre Cuba y Estados Unidos se produce en un momento crítico para la isla. La población cubana enfrenta una de las peores crisis económicas en décadas, con escasez de alimentos, medicamentos y combustible, agravada por los constantes apagones. El gobierno cubano siempre ha responsabilizado al embargo estadounidense como principal causa de esta situación, destacando que las restricciones económicas impuestas desde hace más de 60 años dificultan cualquier intento de recuperación.
La reciente advertencia al diplomático norteamericano llega justo después de que Hammer anunciara en Miami que se están preparando nuevas sanciones contra Cuba, lo que eleva aún más la tensión entre ambos países. Pese a las críticas constantes, el gobierno cubano no ha impedido hasta ahora los desplazamientos del diplomático por el territorio nacional, aunque todo indica que su margen de acción podría reducirse en el futuro cercano.
Este nuevo capítulo en la larga y compleja historia de las relaciones entre La Habana y Washington reaviva viejos fantasmas de la Guerra Fría, donde la diplomacia era muchas veces reemplazada por la confrontación velada. Mientras tanto, el pueblo cubano sigue en el centro de una disputa internacional cuyos efectos se sienten, sobre todo, en su vida diaria.
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